TAE: Tecnología, aprendizaje y entretenimiento

Quiero aprender como lo hacían los aventureros del siglo XVIII y XIX. Quiero crear como los inventores y artistas del siglo XX. Quiero ver materializarse los sueños de la ciencia ficción en el siglo XXI.

lunes, noviembre 13, 2006

El software solito ¿es negocio?

Una realidad del mercado de software en nuetro país es que la piratería es un animal demasiado grande que sabe distribuir y hacer accesible este tipo de productos a la población; claro sin haberlos desarrollado, ni pagar impuestos, pero si poniendole ingenio a los procesos de ingeniería inversa, ruptura de medios de seguridad y con una gran infraestructura de producción masiva.

Por ello, muchas empresas han empezado a optar por un modelo de negocios orientado a servicios web, lo que significa que para usar el producto hay que estar conectado y haber pagado; de lo contrario no hay actualizaciones o servicio. Pero esto asume que el usuario promedio cuente con Internet de velocidad decente en su domicilio, lo cual actualmente es caro y la calidad del servicio es media.

Aqui la encrucijada es ¿cómo hacer del software un negocio rentable? Es un intangicle como las peliculas o la musica, las cuales tambien estan expuestas a la masificación de los piratas.

Pero ¿por qué no pasa lo mismo con otros productos? Los juguetes, por ejemplo, no sufren de este tipo de clonación, aunque si de una competencia desleal feróz por parte de productos de baja calidad. Pero lo tangible parece que tiene la fortuna de que si no se cuenta con los medios de producción adecuados, no resultan tan atractivas las copias como los originales.

Hace poco me toco ver por una estación del metro que un señor vendia "materiales educativos": rompecabezas, dominos, láminas con cuestiones referentes a temas de la escuela (cuerpo humano, matemáticas, etc), y aunque la calidad no era super, dandose maña son suficientes para entretener a los chavitos.

En contraste las grandes casas que surten a las escuelas siguen vendiendo pan con lo mismo; los articulos son los mismos que hace 5 o 10 años, y solo con la fortuna de que algun productor nuevo saque algo novedoso o empiecen a importar, como que vale la pena ir, pero sino, el señor del metro tiene más chance de acercar la educación a las masas.

De hecho en las jugueterías como que esta onda de que el juguete sirva para educar es un buen argumento de venta, y este año, por primera vez, veo que predominan los instrumentos musicales en los catálogos de las tiendas.

Pero la computadora sigue siendo vista como la caja que sirve para que uses el Office e imprimas; un centro de edición.

Me parece que hay oportunidad de que el software sea negocio, aunque todo el rollo que implica abrir una empresa, registrar un producto y producirlo sea un sueño solo alcanzable con financiamiento.

Debe haber una forma de convertir esos miles de centros de edición en centros de entretenimiento educativo.