TAE: Tecnología, aprendizaje y entretenimiento

Quiero aprender como lo hacían los aventureros del siglo XVIII y XIX. Quiero crear como los inventores y artistas del siglo XX. Quiero ver materializarse los sueños de la ciencia ficción en el siglo XXI.

martes, septiembre 12, 2006

Pensar, por qué

Una de las experiencias más enigmáticas durante mis años de escuela, fueron las visitas que el emérito Don Manuel Fletes, fundador del Colegio Amado Nervo, hacia a nuestro salón durante la primaria, secundaria y preparatoria; cada que no había profesor o solo cuando se le ocurría, llegaba con su bata de electricista sobre el traje sastre, sacaba un gis y lo primero que hacía despues de dar los buenos días era escribir: PENSAR, POR QUÉ.

Luego de este rito, hacía preguntas o competencias de cuentas mentales, pero al final de esos atesorables momentos, quedaba un sentimiento de satisfacción y hasta de iluminación.

De todas estas visitas sorpresa recuerdo una en especial, ya en la preparatoria. Una mañana llegó don Manuel, en lo que se antojaba una hora libre, y nos hizo sufrir con las escuadras y compás para hacer construcciones geométricas. Pero algo sucedió ese día. Me surgió la duda de si pensaba, cómo se pensaba, cómo saber si estaba pensando. Un alud de sencillas preguntas me puso la carne de gallina. En casa tomé la enciclopedia y busqué la definición de pensar: "Proceso psíquico racional, subjetivo e interno de conocer, comprender, juzgar y razonar los objetivos y hechos. El pensar produce el pensamiento". Clarísimo ¿no?

Esto me hizo sentir como si leyera un contrato y se me pidiera interpretar la jerga legal de manera fluida.

Pero faltaba la segunda parte del mensaje: Por qué. Y es esta capacidad de cuestionar, investigar y no aceptar dogmas lo que hace que las neuronas trabajen. Es por esto que me encanta leer, y es particularmente útil cuando los niños o jovenes comienzan a preguntar incesantemente por qué; puede que aguante varias andanadas, aunque al llegar a las simplicidades de la vida no tenga todas las respuestas, pero espero que por lo menos mi actitud de intentar resolver sus preguntas sea más útil que cortarles la inspiración con un "ya cállate, que me desesperas".

Ojala un día de estos pueda plantear mi propia definición de lo que es pensar.