TAE: Tecnología, aprendizaje y entretenimiento

Quiero aprender como lo hacían los aventureros del siglo XVIII y XIX. Quiero crear como los inventores y artistas del siglo XX. Quiero ver materializarse los sueños de la ciencia ficción en el siglo XXI.

viernes, mayo 11, 2007

Puente docente

Los puentes unen y acortan distancias. Pero en este caso me refiero al deporte nacional de tomar por asalto los días feriados (con un colchón de 1 día antes y después).

En esta oportunidad tenemos que los profes disfrutarán de tamaño puente que empezará en la tarde del 11 de mayo y terminará el miércoles 16. Cuan merecido descanso de los pupilos amerita este sabático. Obvio, los alumnos ni chistan; ¿también respiran de sus opresores?

Y mientras la industria turística goza de los beneficios del acomodo de festivos, habría que recordar que estamos cerca de la época de exámenes, y muchos no la tienen fácil; pero hay que descansar para recuperar energías, para agarrar fuerza.

Por cierto, habrá que estar atentos puesto que parece que los exámenes y las tareas están en la mira de la ficha negra de la ignorancia, que los quiere desaparecer de la educación básica y media. El argumento: ni idea, pero se está citando a los padres a reuniones en las escuelas para avisarles que el año entrante puede que sea más laxo (o un laxante para la educación). Una contradicción al insistir en cacaraquear continuamente en estos días que la evaluación ENLACE es un medio de mejora.

Que yo sepa todo método educativo tiene de facto una etapa de evaluación; en el sistema tradicional los exámenes y tareas son el único medio para evaluar de manera continua si los estudiantes avanzan, se estancan o retroceden. En algunos otros, los profesores deben de hacer mucho más trabajo de observación e interacción para evaluar, así que ¿de qué se trata, cambiar el modelo o adoptar un enfoque minimalista?

A todos los profesores que cumplen e inspiran, mi respeto y felicitaciones.

A mis alumnos que han también escogido el camino de las aulas, mi reconocimiento y apoyo.

No saben cuanto se necesitan no solo declamadores, sino motivadores y críticos que moldeen y guíen a las nuevas generaciones.